domingo, 9 de diciembre de 2007

Quema y destrucción de documentos....

La quema y destrucción de documentos importantes es una tradición que el hombre civilizado realiza desde unos minutos después de la invención de la escritura. Estas acciones solemnes se solían realizar antiguamente delante de una chimenea o espacio adecuado para tal fin (como por ejemplo en papeleras y con la ayuda de un poco de alcohol). Pero siempre siguiendo las pautas del rito, se daba el tiempo suficiente a recuperar lo que quemabas (siempre se podía cometer errores y destruir lo que no era) y contemplando tranquilamente como el fuego destruía lo que no queríamos que pasara a la posteridad para asegurarnos finalmente que no quedaba ni rastro de las pruebas incriminarías...

Pero en los tiempos que vivimos, la invención de los documentos auto destruibles (aviso: este documento no se destruirá en cinco segundos), la instalación de las calefacciones y los detectores de humos han ido reduciendo paulatinamente la practica de estos métodos de destrucción por diversos motivos. Pero en algunos recodos remotos, todavía se práctica como se puede ver...


Desgraciadamente, la gracia y el estilo de estas antiguas prácticas se va perdiendo y personalmente, yo tampoco me quedaría a contemplar como acaba de arder el contenedor de basuras, por no hablar del peligro de los humos provocado por la quema de plásticos y substancias nocivas.

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