viernes, 31 de octubre de 2008

Me las piro del CaraLibro.com

(o intentos de fuga de facebook.com a medianoche...)

Desde pequeñito siempre me han dicho que "rectificar es de sabios", pero más bien siempre he opinado lo contrario, puesto que la definición de sabio implica un grado más alto de conocimiento, una conducta prudente o un conocimiento profundo. Así pues, yo siempre he pensado justamente todo lo contrario al dicho, ¡un sabio no debería rectificar! más bien por lógica, no debería equivocarse, con lo que sin equivocación es difícil el poder rectificar (esto último es algo que tampoco todo el mundo llega a comprender).

En este caso, en el que más bien se debería decir, "la has cagado pese a estar advertido!" y aplicando el minoritario dicho "rectificar es de idiotas, que la cagaron previamente y posteriormente se vieron obligados a rectificar!" he procedido a darme de baja de la red social "CaraLibro" y cual ha sido mi primera sorpresa que la opción que dan es "desactivar cuenta". Posteriormente rebuscando en el Internet, he encontrado varios enlaces, que explican el no tan trivial proceso para solicitar la baja, ocultos a la vista directa del incauto usuario.

Pero, ¿qué clase de broma era esta?. Una base de datos que se podría clasificar según la Ley Orgánica de Protección de Datos de crítica por contener entre otros datos políticos y religiosos de usuarios, ¿no ofrecen a primera instancia la opción de borrarse libremente? No sé porqué pero tiene la pinta de incumplir unos cuantos aspectos de LOPD, entre ellos hacer efectivo el derecho de borrado de los datos y en su caso si estos han sido comunicados previamente también deberían encargarse de la comunicación de la cancelación de los datos (en la instalación de las aplicaciones de terceros estás dando acceso a todos tus datos, sin conocimiento a cual acceden, copian o propagan a los cuatro vientos).

Cualquiera podría pensar que como el sr. CaraLibro al vivir en la otra punta del charco, queda libre de las horribles obligaciones de la LOPD, pero no es así. Si fuera así, yo mismo me estaría dedicando a incumplir uno por uno todos sus artículos en máquinas alquiladas estrategicamente en diferentes partes del globo, sin embargo, por lo que recuerdo, la ubicación geográfica de los datos, no importa si el delito afecta a personas o territorio cercano a las afueras de Bilbao y por lo visto las afueras de Bilbao no llegan tan lejos como yo creía, puesto que por aquí no he visto que les hayan dicho nada. Eso sí, en Canada ya les han cascado un par de denuncias por la violación de las leyes de protección de datos del país.

En fin, por ahora he dejado la cuenta "desactivada", es decir, en un estado que puedes volver a entrar introduciendo tu usuario y clave, y en la que se mantienen todos tus datos de igual forma que si no hubieras dicho que te ibas. Es decir, más o menos igual que si no quieres volver a entrar más, que es lo mismo que lo que hace la mayoría de gente despues de pasar unas semanas haciendo el paripé. Únicamente he dejado mi último acceso en "El menda se da de baja del CaraLibro..." como un simple "Yo pasé por aquí, pero ya me he ido y dudo que vuelva...". Y por lo que queda escrito no me preocupo, total son las 28 mismas letras que utilizan las grandes obras de la literatura universal pero escritas en otro orden...

1 comentario:

Anónimo dijo...

No fui yo quien te dijo que caralibro era un poco... hmmm.... como un juguete?

Si intentas buscarle usabilidad tiene más bien poca.

Si sirve para 'alguna' cosa.

 
AVISO:Cualquier imagen de procedencia externa se retirará a petición de sus propietarios.